· Sobre la Ley 11/2017 de Buen Gobierno y Profesionalización de la Gestión de los Centros y Organizaciones Sanitarias del Servicio Madrileño de Salud, el portavoz de Sanidad del Partido Popular en la Asamblea de Madrid explica que “no aporta flexibilidad en situaciones como la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19, al no permitir realizar nombramientos de Directivos de forma rápida”.
· Los hospitales funcionaron de forma muy autónoma en la primera ola de la pandemia y, pese a que al principio hubo muchas críticas, ello conllevó una red de información informal entre los profesionales sanitarios para compartir conocimientos, experiencias y ayuda.
· Para Eduardo Raboso, tener una financiación finalista está bien, pero la actualidad requiere que exista una partida sustancial reservada y asignarse en función de lo que surja, ya sea gestionar una pandemia o incorporar innovación al sistema sanitario.
Madrid, 27 de abril de 2021.- “Es necesario revertir la orden que cambió a los gerentes de hospital altos cargos, siendo esto un factor de agravio en términos de remuneración”, ha explicado Eduardo Raboso, portavoz de Sanidad del Partido Popular (PP) en la Asamblea de Madrid, durante su participación en el ciclo de e-Debates Políticos pre-Elecciones en la Comunidad de Madrid, organizado por la Agrupación Territorial de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) en Madrid, comprometiéndose a ello si el partido gana las Elecciones el próximo 4 de mayo. Respecto a la Ley 11/2017 de Buen Gobierno y Profesionalización de la Gestión de los Centros y Organizaciones Sanitarias del Servicio Madrileño de Salud, Raboso afirma que “no aporta flexibilidad en situaciones como la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19, al no permitir realizar nombramientos de Directivos de forma rápida a pesar de ser necesario”.
Al igual que los demás participantes en este ciclo, Eduardo Raboso ha expuesto su opinión sobre otros temas de gran interés y actualidad: cronicidad, Salud Pública, innovación, digitalización, Recursos Humanos, crisis sanitaria y financiación de la sanidad. Sobre el primero, la atención a la cronicidad y la integración sociosanitaria, el portavoz de Sanidad del PP en la Asamblea de Madrid destaca que una opción de su partido es crear una Consejería de Servicios Sociosanitarios y, si no, como segunda opción sería crear una interfaz potente en que ambos servicios compartan datos y coordinación, “si bien la Comunidad de Madrid ya ha avanzado en este sentido, haciendo que la Consejería de Sanidad asuma asuntos sociales”, afirma.
Respecto a la crisis sanitaria, Eduardo Raboso hace hincapié en que “lo único que se debería haber gestionado mejor en la Comunidad de Madrid fue la disposición de rastreadores, teniendo quizá que haber destinado más recursos a ello” y continúa: “Los hospitales funcionaron de forma muy autónoma en la primera ola de la pandemia y, pese a que al principio hubo muchas críticas, ello conllevó una red de información informal entre los profesionales sanitarios para compartir conocimientos, experiencias y ayuda”.
Y también en relación a la crisis sanitaria, ésta ha puesto de manifiesto la necesidad de desarrollar una estructura de Salud Pública más fuerte, “tanto desde una perspectiva nacional como autonómica, de forma que no hacerlo mostraría una gran irresponsabilidad”, hace hincapié Eduardo Raboso. En la misma línea, durante la pandemia, la Comunidad de Madrid ha contratado 11.600 profesionales y, en la actualidad, casi 90.000 personas trabajan en la sanidad pública. En palabras de Raboso, “uno de cada 40 personas en nuestra Comunidad trabaja de forma directa en la sanidad madrileña y, en este sentido, de forma responsable, antes de afirmar que se necesitan médicos en Madrid, habría que hacer un análisis serio sobre las necesidades”.
Junto al reconocimiento de la labor realizada por los profesionales sanitarios, Raboso ha reconocido durante el e-Debate la llevada a cabo por los Directivos de la Salud en la gestión de la pandemia
Financiación sanitaria y de la innovación
Ante las innovaciones en salud que se espera lleguen en los próximos años, para el portavoz de Sanidad del PP en la Comunidad de Madrid, “preocupan dos cosas. La primera se trata de la validación de las innovaciones, con un análisis sobre el coste-beneficio de la innovación. Y la segunda la politización de la innovación”. ¿Y sobre la financiación? “La sanidad debe tener la flexibilidad suficiente para dar respuesta y eso incluye también la financiación” –explica-. “Tener una financiación finalista está bien, pero la actualidad requiere que exista una partida sustancial reservada y asignarse en función de lo que surja, ya sea gestionar una pandemia o incorporar innovación al sistema sanitario”.