D. Salvador Núñez Díaz. Jefe de Gestión Sanitaria (Control de Gestión) del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC)

D. Álvaro Muñoz Galindo. Subdirector Médico del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA)
23 julio, 2020
Dña. Eloína Núñez Masid. Gerente del Área Sanitaria de Santiago de Compostela y Presidenta de la Agrupación Territorial de SEDISA en Galicia
23 julio, 2020

¿Qué podemos aprender de la gestión de la pandemia?

Desde la perspectiva de la gestión de la información, lo que nos ha enseñado la pandemia es la necesidad de establecer, lo antes posible, criterios claros y precisos de lo que queremos cuantificar ante determinadas situaciones de crisis sanitaria, pero a la vez, debemos dedicar el tiempo necesario en estructurar un buen diseño de indicadores para evitar modificaciones posteriores que dificulten la elaboración de una información homogénea a lo largo del periodo de crisis. En definitiva, debemos mejorar nuestros sistemas de información.

Otra enseñanza que podemos extraer de esta situación es que necesitamos de las Tecnologías de la Información (TIC) y de la inteligencia artificial para catalizar el cambio de las organizaciones sanitarias para mejorar procesos y resultados.

¿Cómo deben reenfocar los Directivos de la Salud su labor en la gestión sanitaria desde ahora?

Nuestra experiencia en el área de la gestión de la información se basó, por un lado, en habilitar marcas en la Historia Clínica Electrónica que describían la situación del paciente: sospecha, caso confirmado, negativo y negativizado según los resultados de la PCR.  Estas marcas son de gran utilidad tanto desde el punto de vista asistencial como para una explotación actualizada de la información. Por otro lado, el servicio de Tecnología de la Información diseñó descargas automatizadas de información, basada en los resultados de laboratorio, para alertar la confirmación de resultados, ingresos, altas, estado del censo hospitalario, entre otros indicadores, de los pacientes Covid-19, que se difundía en tiempo real a determinados grupos de interés mediante email o mensajes a través de apps como Telegram.

Además, como consecuencia del desplazamiento de una parte importante de la actividad convencional a una actividad telemática para que el paciente solo acudiera al hospital si era necesario, los sistemas de información se adaptaron para el registro de los datos de esta modalidad asistencial.

Con esta breve descripción de nuestra experiencia, mi punto de vista, desde el ángulo de la gestión de la información, es que el reenfoque debe ir dirigido hacia un desarrollo avanzado en TIC y a un desarrollo de una normativa específica que regule todos los aspectos y las prestaciones de la telemedicina para que la medición de todos los indicadores sea comparable. Se debe asegurar asimismo el correcto funcionamiento de estas mediante campañas de formación de todo el personal implicado por la gran introducción de datos que lleva aparejado.

¿Qué medidas cree que se deben adoptar a medio-largo plazo para conseguir un sistema sanitario sólido, foco de calidad y eficiencia?

En general, es imprescindible llevar a cabo una planificación sanitaria que contemplen situaciones de crisis sanitarias. Para ello es necesario tener sistemas de información potentes donde el objetivo último es el establecimiento de una comunidad de salud digital, es decir la automatización e interconectividad del conjunto amplio de las organizaciones (ámbitos, de Atención Especializada y Atención Primaria, hospitales, comunidades autónomas, etc.) que intervienen en la salud en un entorno determinado. Con otras palabras, el hospital y ninguna organización sanitaria deberían existir de forma aislada sino interconectada.