SEDISA publicará un documento-resumen con las propuestas de cada partido político en torno a las 10 claves sanitarias ante las Elecciones Generales desde el punto de vista de la gestión
Madrid, 11 de abril de 2019.- Evaluar, analizar, planificar a medio-largo plazo, la profesionalización de los directivos de la salud y la autonomía de gestión por parte de los centros son algunas de las claves sanitarias que PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos están de acuerdo, tal y como se puso ayer de manifiesto en el Debate ‘10 CLAVES Sanitarias ante las Elecciones Generales’, celebrado ayer por la tarde en la sede de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) en Madrid y en el que han participado alrededor de 80 profesionales de distintos ámbitos del sector (directivos de la salud, representantes de sociedades científicas, compañías, etcétera). En el Debate han participado Eduardo Raboso, portavoz de Sanidad del PP en la Asamblea de Madrid, José Manuel Freire, portavoz de Sanidad del PSOE en la Asamblea de Madrid, Enrique Veloso, portavoz de Sanidad de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, y Mónica García, responsable Salud Más Madrid Comunidad.
En los próximos días, SEDISA publicará un resumen en el que se recojan las propuestas vertidas por los partidos durante el debate desde el punto de vista de la gestión. “La calidad de nuestro sistema, tanto público como privado, es buena. No obstante, debemos evolucionar hacia la innovación en gestión y eficiencia, para que esa calidad siga siendo una realidad y evolucione hacia lo que la población necesita y haciendo que el sistema sea solvente”, explica Joaquín Estévez, presidente de SEDISA. “Para ello, además, la sanidad no debe ser un motivo de lucha y disputa entre partidos políticos, necesitamos un pacto por la sanidad y una apuesta por la profesionalización de los directivos, que conlleva directamente también la profesionalización de la gestión. En definitiva, una apuesta por una visión estratégica, no cortoplacista, de la sanidad y la salud, con el impulso de algunas líneas de trabajo prioritarias, como medición de resultados en salud, uso de análisis de datos para la toma de decisiones, integración asistencial sociosanitaria, reorganización de recursos y medir e incluir en las decisiones la experiencia del paciente”.
Porque la sanidad debe formar parte del debate político siempre y cuando sea para mejorarla en términos de calidad y eficiencia y no como arma arrojadiza entre partidos. Para ello, el debate ha girado en torno a 10 claves para mejorar el modelo sanitario: políticas sanitarias, financiación de la sanidad, Consejo Interterritorial, modelos de gestión, calidad y eficiencia, gestión sanitaria desde la mesogestión, profesionalización de la gestión, participación ciudadana en la mesogestión, gestión de la innovación, innovación en gestión y equidad. Según el presidente de SEDISA: “independientemente del partido político que gobierne y de las políticas que lleven en sus programas políticos en lo referente a sanidad, hay medidas que deben estar en cualquier base política para hacer que el sistema sanitario funcione mejor, como políticas sanitarias que hagan posible una gestión sanitaria que aporte calidad y eficiencia, potenciar la financiación de la sanidad, con presupuestos finalistas y un mayor esfuerzo para esta área, un Consejo Interterritorial que tome decisiones importantes vinculantes y que garantice la equidad y la calidad en todo el país y el impulso de la medición de resultados y análisis de datos en el marco de la afirmación y defensa de que un modelo de gestión no es bueno ni malo por sí mismo sino por cómo se gestiona y por lo que aporta”.
Con un enfoque global y estratégico, y con visión de medio-largo plazo, todo ello va ligado al desarrollo del buen gobierno de las organizaciones sanitarias, en el que prime la autonomía de la gestión y la toma de decisiones y la evaluación por resultados. En esta línea, desde el nivel de mesogestión, el directivo traslada el despliegue de los planes diseñados por la autoridad sanitaria al entorno en el que los profesionales desarrollan su actividad prestando el servicio a los ciudadanos. “Se nos ha transferido la responsabilidad de asegurar un servicio de calidad y la gestión de unos recursos humanos y materiales para poder hacerlo”, explica Modoaldo Garrido, director gerente del Hospital Universitario Fundación Alcorcón y vicepresidente primero de SEDISA, quien añade: “Representamos en los centros a la institución de la que somos parte y el ejercicio de nuestra función con la lealtad debida y nos corresponde alinear al nivel de la microgestión el despliegue de los planes buscando el compromiso de los profesionales y la participación de los pacientes”.
Para ello, se hace fundamental el buen gobierno y, para que este sea posible, se requiere de directivos profesionalizados, formados, con experiencia, comprometidos y honestos.
Innovación en gestión y gestión de la innovación
Junto a la innovación terapéutica y la innovación tecnológica, la innovación es gestión es el valor transversal y global desde todos los puntos de vista que condiciona al resto, “ya que sin ella es muy difícil poder plantear la aplicabilidad de la innovación en el resto de los ámbitos e incide directamente en los índices de sostenibilidad y, sobre todo, solvencia del sistema”, explica Manuel Vilches, director de la Fundación para el Desarrollo y la Integración de la Sanidad (IDIS) y vocal de la Junta Directiva de SEDISA. Pero tal y como ha explicado Manuel Vilches durante el debate, “la innovación en España adolece de las mismas debilidades que la sanidad en general: disponer de una estrategia clara y definida, análisis y evaluación para valorar las actuaciones adecuadas para invertir y, como no, para desinvertir, visión a medio-largo plazo y planificación global a corto, medio y, sobre todo, largo plazo y basada en resultados en salud”.
Asimismo, el director de la Fundación IDIS ha destacado que es necesario tener en cuenta la aportación de innovación por el sector sanitario privado (investigación clínica, innovación en gestión, etcétera), “siendo fundamental la colaboración público-privada, en su acepción más global, y en todos los sentidos, como en modelos de gestión y en las fórmulas de incorporación de la innovación en el sistema, con las nuevas fórmulas de compra innovadora y avanzar en modelos de partenariado que favorezcan la disponibilidad temprana de toda posible innovación que aporte valor al sistema y, sobre todo, al paciente”, ha concluido Manuel Vilches.