Justificación

No es posible planificar un Sistema Sanitario del futuro sin datos. No podemos navegar sin hoja de ruta, sin brújula y sin mapas de navegación. Y es que no solo es necesario medir con indicadores de proceso, sino que debemos implementar la estrategia de los resultados en salud en la gobernanza de las Organizaciones Sanitarias, así como el concepto de aportación de valor, de hacer más con lo mismo, aportando buenos resultados en salud de forma costo-eficiente, materializando el compromiso del Sistema con los pacientes y la sociedad en general. 

Se trata, además, de aprovechar una de las mayores fuentes de financiación en el Sistema Sanitario, que son sus datos, debido a que un gran hospital terciario puede generar a lo largo de un año más datos que la agencia tributaria de su provincia.

Situación

En nuestro país, en la actualidad, se están llevando a cabo muchos estudios transversales y retrospectivos, pero es necesario medir y realizar análisis que sean palancas clave para evolucionar de lo analógico a lo digital. En estos momentos, vivimos una transformación digital acelerada que ha permitido que cuestiones esenciales como el hospital sin paredes, la telemedicina, la dispensación en el domicilio de farmacéuticos se lleven a cabo. No obstante, queda mucho camino por recorrer, dada la heterogeneidad en la transformación digital y la falta de interoperabilidad de los sistemas informativos de las Organizaciones Sanitarias, incluso dentro de una misma comunidad autónoma.

Directivos de la Salud

En ello, el papel de los Directivos de la Salud ha de ser una palanca de cambio, un promotor de innovación y del cambio, y también debe contribuir a diseñar el futuro. La gestión sanitaria está marcada por la implementación de los datos y se debe contribuir a la formación de los Directivos de la Salud en la innovación y el uso de las nuevas tecnologías o el uso de nuevos modelos de liderazgo en los ámbitos de la salud.