Madrid, 4 de junio de 2020.- Sin la naturaleza, la variedad alimenticia, el aire que se respira el agua para beber o el clima que hace posible la vida en la Tierra no existirían. “La pérdida de la biodiversidad terrestre hace más vulnerable a hombres y mujeres y amenaza la salud y la supervivencia como especie”, explica Anna Rodríguez Cala, directora de Estrategia del Institut Català d’ Oncologia (ICO) y responsable del Comité de RSC y Ética de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA). “Por ello, es fundamental que empresas y organizaciones desarrollen una política medioambiental, tanto en lo que se refiere a la gestión responsable como a la concienciación de sus trabajadores y colaboradores sobre la importancia de cuidar por el medioambiente”.
Mañana, 5 de junio, se celebra el Día Mundial del Medioambiente bajo el lema Por la naturaleza, con el fin de concienciar sobre la importancia de la biodiversidad del planeta. En el caso de las Organizaciones Sanitarias, Joaquín Estévez Lucas, presidente de SEDISA y Fundación SEDISA, recuerda que “éstas tienen un papel fundamental en la sensibilización y actuación en este ámbito, de la que el compromiso con el medio ambiente (plan de gestión de residuos, sistema de gestión medioambiental, optimización del uso de agua, etcétera) forma parte. No obstante, se estima que dos de cada 10 Organizaciones Sanitarias aún no tienen implementada una política medioambiental, algo fundamental para mantener la biodiversidad”. Asimismo, SEDISA quiere recordar el efecto negativo que la pérdida de biodiversidad terrestre tiene en la salud de la población y que “por ello, las Organizaciones Sanitarias y los Directivos de la Salud deben reforzar su compromiso con la biodiversidad, pues solo el hecho de la falta de variedad en la alimentación repercute en el aumento y empeoramiento de enfermedades metabólicas, que ocasionan un gran número de complicaciones y carga para el sistema sanitario”.
Precisamente, el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 3 se dedica a la ‘Salud y bienestar’, compromiso esencial para las Organizaciones Sanitarias, por lo que éstas deben trabajar en todos los factores relacionados con este ODS, incluyendo las políticas medioambientales, la gestión de residuos y la conservación de la biodiversidad. Los ODS fueron aprobados por 193 países miembros, en el marco de la organización de las Naciones Unidades en septiembre de 2015, en lo que firmaron una alianza mundial que se materializó en el establecimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad en los próximos 15 años. Según Anna Rodríguez Cala, “la Agenda aborda cinco grandes áreas conocidas como las cinco “P”; personas, planeta, prosperidad, paz y partenariado. Los objetivos cubren ámbitos como la pobreza, las desigualdades, la seguridad alimentaria, la salud, el consumo y la producción sostenibles, el crecimiento, la ocupación, las infraestructuras, la gestión sostenible de los recursos naturales, los océanos y el cambio climático. Y también la igualdad de género, la paz, la inclusión social, el acceso a la justicia y las instituciones responsables”.
SEDISA, como organización, ha priorizado el ODS 3 ‘Salud y bienestar’, el ODS 4 ‘Educación de calidad’ y el ODS 17 ‘Alianzas para lograr los objetivos’, así como el ODS 5 ‘Igualdad de género’, el ODS 8 ‘Trabajo decente y crecimiento económico’, el ODS 12 ‘Producción y consumo responsable’ y el ODS 13 ‘Acción por el Clima’. “En base al compromiso con el ODS 13, SEDISA pretende concienciar sobre la importancia de éste para la humanidad y para la salud de la población”, explica Anna Rodríguez Cala.