Se ha presentado en Madrid la primera herramienta española que permite a los oncólogos identificar en muy poco tiempo los efectos psicológicos y emocionales que causa el cáncer en cada paciente. ADAF es una solución específica, fiable y de fácil manejo, que, a través de un sencillo cuestionario, mide por primera vez tres variables esenciales: correcto afrontamiento de la enfermedad, ansiedad y depresión, lo que puede resultar fundamental para la evolución de los pacientes con cáncer. De hecho, el cáncer es una enfermedad con efectos psicológicos muy importantes. De hecho, entre el 5 y el 60% de los pacientes sufren ansiedad y depresión, dependiendo del tipo de cáncer.
En el informe La atención psicológica al paciente de cáncer en España, elaborado por el Instituto Max Weber y la Fundación Mylan para la Salud, sirvió de base para plantear este proyecto, analizando las divergencias entre la atención emocional que los pacientes oncológicos realmente reciben y la que deberían recibir. En él se identificó que el 98% de los oncólogos considera necesaria la atención psicológica, pero, al mismo tiempo, reconoce que no se dispone de los recursos necesarios para llevarla a cabo con eficacia. De hecho, solo el 18% de los oncólogos valoran el estado psicológico de sus pacientes.
En rueda de prensa, el doctor Pedro Pérez Segura, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, afirmó que se trata de una “herramienta de gran utilidad pues las que teníamos hasta ahora no nos permitían hacer un cribado rápido y eficiente de estos pacientes”. Y es que conocer y gestionar adecuadamente la situación emocional de los enfermos oncológicos “resulta capital, pues suelen afrontar, desde el instante mismo de su diagnóstico, una situación extremadamente delicada, que han de asimilar para poder enfrentar todo lo que viene después”.
La necesidad de un abordaje psicológico
En el abordaje psicológico de los pacientes oncológicos conviven dos factores importantes, según el apuntó el doctor Ignacio Juez, jefe del Servicio de Oncología del Hospital Universitario de Fuenlabrada: “por una parte, la falta de experiencia de algunos facultativos en esta materia específica, a la que suele sumarse, en segundo lugar, el escaso tiempo disponible en las consultas para abordar estas situaciones tan importantes”. Por eso –argumenta– “si los oncólogos contamos con una herramienta que identifique las necesidades de atención psicológica y que se pueda utilizar en poco tiempo, podremos derivar a Psiconcología a aquellos pacientes que lo necesiten, de manera que los factores emocionales puedan ser identificados, abordados y monitorizados”.
Desde la perspectiva de los pacientes –añadió el doctor Juez– “esta herramienta ofrece la posibilidad de que el enfermo sea abordado como persona y no solo como paciente con cáncer a nivel físico/sintomático”.
Estudio multicéntrico en 5 hospitales
La herramienta ADAF se ha podido diseñar gracias a un estudio transversal y multicéntrico, que se ha venido desarrollando durante un año en los servicios de Oncología Médica y Radioterápica de cinco hospitales de la Comunidad de Madrid: Clínico San Carlos, Universitario de Getafe, Universitario Severo Ochoa, Universitario Fuenlabrada y Universitario 12 de Octubre.
En esta investigación participaron 186 pacientes con diagnóstico oncológico, todos ellos atendidos en las consultas de Oncología Médica y Radioterápica de los centros participantes y mayores de 18 años. Para determinar las propiedades psicométricas del cribado se planteó a los participantes el Cuestionario de Cribado (ADAF), que se interesa por cinco ítems: uno relativo a sintomatología ansiosa, dos relativos a sintomatología depresiva, uno para afrontamiento tipo indefensión y otro para afrontamiento tipo evitativo.
Implementación y próximos pasos
La doctora Marta Redondo, del Departamento de Psicología de la Universidad Camilo José Cela, señaló en la misma rueda de prensa que, en este punto del proyecto, se plantean dos próximos pasos para implementar esta herramienta en los servicios españoles de Oncología.
El primero de ellos se orienta a desarrollar “un asistente de inteligencia artificial que va a actuar como un chatbot de Telegram”, programándolo de tal manera que el propio paciente pueda cumplimentar el cuestionario, antes de su siguiente visita al oncólogo. Redondo explicó que “los resultados de este cuestionario, llegarán directamente al especialista, incorporándose a la historia clínica del paciente; en caso de que este presente una puntuación significativa, el facultativo podrá prestar atención a estos factores emocionales durante la próxima consulta clínica o, si lo considera oportuno, derivarlo a Psicooncología”. Además, se van a desarrollar una serie de audios para acompañar al paciente entre las visitas clínicas, diseñados para poder ayudarle a gestionar su depresión o su ansiedad.
Por otra parte, Redondo hizo referencia a la segunda vía de implantación: un programa de formación de formadores para facilitar que la herramienta ADAF llegue a la mayor cantidad posible de servicios de Oncología, pues “los oncólogos precisan formación específica para comunicar adecuadamente las malas noticias a los pacientes”.
La Fundación Mylan para la Salud ha asumido tanto la coordinación del informe de situación, como el estudio previo piloto llevado a cabo en los cinco centros hospitalarios, así como la implementación de esta solución de diagnóstico. Su director, Javier Anitua, subrayó en la rueda de prensa “el compromiso que nuestra Fundación tiene con la calidad de vida de los pacientes; concretamente, en el caso de quienes padecen cualquier tipo de cáncer, resulta fundamental la disposición emocional y psicológica para hacer frente a la enfermedad. Por eso es tan importante brindarles ayuda, facilitando a los oncólogos instrumentos específicos de evaluación”.