El Big Data pone en el centro al paciente aportando un gran avance en la medicina personalizada
Madrid, 12 de diciembre de 2022.- ¿Qué es el Big Data? Juan José Beunza, catedrático de Salud Pública y Educación Interprofesional y director de IA Salud de la Universidad Europea de Madrid, lo define como “la incorporación de múltiples herramientas que nos proporcionan un volumen de datos, una variedad y un acceso a los datos no estructurados en tiempo real que va a cambiar radicalmente tanto la atención clínica de paciente como la gestión del sistema sanitario”. Durante el tercer vídeo publicado dentro del programa MicroFormación de la Fundación se pone en evidencia el cambio de paradigma que supone el Big Data: “El centro de actividad clínica va a dejar de ser el médico y va a pasar a ser el paciente, que puede estar en cualquier lugar. Se consigue un diagnóstico precoz, ya que no necesita que el paciente haya desarrollado los síntomas o, al menos, los haya percibido. Además, supone un gran avance en la medicina personalizada, centrando los diagnósticos en la experiencia del propio paciente aportándole un tratamiento personalizado”.
Por todos estos motivos “el 97,2% de las organizaciones están invirtiendo en Big Data y en Inteligencia Artificial”. Y es que el Big Data supone una gran mejora para el sistema sanitario y también una gran oportunidad para el mercado y para la mejora y desarrollo de la gestión sanitaria de las organizaciones. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no funciona de manera independiente “depende del machine learning, unos algoritmos de aprendizaje automático que permiten manejar ese gran volumen de datos; la nube, que proporciona un espacio en el que almacenar y procesar dichos datos; streaming, el encargado de que estos datos que se gestionen en tiempo real y el internet de las cosas, mediante el que podemos captar y procesar de todos los datos”. Todos ellos nos ayudan a manejar “los datos no estructurados, aquellos que no pueden ser reflejados fácilmente en un Excel, tal y como las historias clínicas electrónicas, las imágenes, los archivos de audio y vídeo. Este tipo de datos nos aportan información de lo que hace esa persona y puede ser usada con fines médicos”.
Sus usos en el campo de la medicina están suficientemente respaldados por los avances que han conseguido aportar. “Gracias a este tipo de avances en tecnología se ha conseguido desarrollar, por ejemplo, un algoritmo que permite un diagnóstico predictivo del Alzheimer. También se ha conseguido implementar mejoras con aquellos datos que no son médicos: es posible diagnosticar a una persona con un trastorno bipolar o con un cambio de fase dentro de la misma por su actividad en Twitter”.
Con este programa “MicroFormación de la Fundación” la Fundación SEDISA reafirma su compromiso con la profesionalización del directivo de la salud, y como afirma Jesús Sanz Villorejo, Vicepresidente de la Fundación SEDISA, “apostando por el aprendizaje a lo largo de toda la vida, que de acuerdo con lo postulado por Jacques Delors y recogido en un informe de la UNESCO, se sustenta en los cuatro pilares de la educación: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y aprender a vivir con los demás”. En suma, se trata de un innovador programa formativo consistente en píldoras formativas en formato vídeo en las que se abordarán diversas temáticas, todas ellas en torno a la gestión sanitaria.