Madrid, 6 de noviembre de 2018.- Mañana, 7 de noviembre, la Asociación Española para la Calidad (AEC) impulsa en España la celebración del Día Mundial de Calidad. Propugnado por la Organización de Naciones Unidas en 1990, se trata de una “jornada dedicada a aquellos que viven la calidad como una disciplina fundamental para asegurar la competitividad de las empresas y la prosperidad de los países integrando todas sus visiones y perspectivas de la disciplina calidad”. Es el caso de los directivos de la salud, cuyo papel quiere destacar la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) en el marco del Día Mundial de Calidad, por su dedicación y trabajo a favor de la calidad desde la gestión sanitaria, a la vez que hace un llamamiento para continuar trabajando en esta línea, incorporando la visión de los pacientes y usuarios del sistema.
Joaquín Estévez Lucas, presidente de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), justifica esta visión: “Los directivos de la salud son ‘líderes ocultos’, pues de forma silenciosa y discreta tienen un gran impacto en la sociedad y son referentes en la transformación y el éxito de sus organizaciones y, asimismo, son ‘héroes de la calidad’, en tanto en cuanto están obligados a basar su modelo en ésta”. A este respecto, según se recoge en el Sondeo sobre Implementación de la RSC en las Organizaciones Sanitarias en España, realizado por SEDISA en enero de este año y en el que participaron 180 directivos de la salud, se estima que alrededor de siete de cada 10 organizaciones sanitarias en España (el 72%) tiene un sistema de gestión de calidad. Según Anna Rodríguez Cala, directora de Estrategia y RSC del Institut Català d’ Oncologia (ICO) y responsable del Comité de RSC y Ética de SEDISA, “Si bien es un porcentaje importante, hay mucho camino por recorrer aún. Además, se debe evaluar si los sistemas responden a las necesidades de los usuarios y pacientes, a la gestión por procesos, a incrementar el logro de los objetivos de la organización, si se miden los resultados y la medición se realiza con los indicadores oportunos. En definitiva, el sistema de gestión de la calidad debe formar parte de la visión y misión de las organizaciones y de la cultura organizacional de éstas”.
“Se trata -añade- de una visión moderna de la calidad, sostenible y alineada con la estrategia y el management en el ámbito de la salud. Para ello, se debe poner en valor la aportación de la calidad a las organizaciones y a los sistemas sanitarios, para lo que los directivos tienen que liderar esta línea de trabajo como algo estratégico”.
La calidad asistencial como elemento transversal de cohesión del sistema
La prevención, promoción y calidad asistencial son elementos transversales que permiten cohesionar el sistema de salud y el comportamiento de las organizaciones orientándolo hacia los objetivos asistenciales, económicos, sociales y de mejora de la calidad que se necesitan plantear y alcanzar. “Pero para que esto sea factible es necesario materializar dichos elementos transversales mediante una implementación efectiva, crear indicadores para su evaluación estandarizada y analizar resultados para corregir y mejorar”, explica el presidente de SEDISA. Con el fin de poder conocer la percepción que tienen al respecto los gerentes de hospital en España, SEDISA ha llevado a cabo recientemente el sondeo de opinión Prevención, Promoción de la Salud y Calidad Asistencial. Elementos clave en la mesogestión. El sondeo, al que han respondido un total de 40 gerentes de hospital, aporta algunos datos sobre la percepción y retos sobre la prevención y promoción de la salud en el marco de la mesogestión, que confirman algunas hipótesis.
El 62% de los participantes opina que los planes de salud son fundamentales para la calidad asistencial en sus centros, si bien su implementación más a medio-largo debe ayudar también a la mejora de la eficiencia, el 25% opina que es fundamental, el 10% cree que aportan calidad pero que no está demostrado que sean fundamentales y el 3% cree que no es fundamental.
Implementación, evaluación y trabajo en equipo, claves
El 40% de los gerentes de hospital que han participado en el sondeo cree que los planes de salud de la Consejería podrían aportar mucho pero que necesitan de una mayor implementación y el 30% cree que su implementación mejoraría si fueran más operativos en su desarrollo. Pero, además, el 20% piensa que no está demostrado con evidencia que mejoren la calidad y la eficiencia de la asistencia sanitaria y el 10% cree que faltan indicadores para evaluar resultados. Según el Joaquín Estévez Lucas, “desde la macrogestión no se establecen herramientas, indicadores ni una cultura en la que la promoción y prevención de la salud sea relevante dentro de la gestión sanitaria. Los motivos pueden ser una visión cortoplacista de la sanidad y de los resultados y gestión poco enfocada aún a la medicina preventiva y atención a la cronicidad”. Esto es algo que se confirma en el sondeo: el 50% cree que desde la macrogestión se transmite la importancia de los planes de salud si bien cree que hay mucho trabajo por realizar desde la macro hacia la meso y microgestión y el 32% opina directamente que esta transmisión no existe.
En el sondeo se ha preguntado a los gerentes de hospital cuál es la medida más prioritaria para la implementación de los planes de salud en el ámbito de la mesogestión y la mitad de los encuestados cree que es la creación de grupos de trabajo que impliquen a los tres niveles de gestión para desarrollar herramientas de implementación de los planes de salud en los ámbitos de la meso y microgestión. La segunda medida más seleccionada ha sido el mayor desarrollo, con más operatividad, de los planes de salud, por el 32%, seguido por el desarrollo de indicadores de evaluación de la implementación de los planes de salud, por el 17%. “Precisamente –añade el presidente de SEDISA- la deficiencia de medición en nuestro país se localiza, sobre todo, en aquellos resultados que no se encuadran en el marco de resultados económicos. Sin embargo, en gestión sanitaria debemos conocer que los resultados en salud, y la calidad asistencial mejoran, sin duda, la eficiencia de los sistemas sanitarios”.
En cuanto al papel del directivo, el presidente de SEDISA hace hincapié en que es fundamental en la construcción de la cultura de estrategia de la prevención, promoción y calidad asistencial y en este punto debe trabajar hacia la microgestión en ello. En este marco, el 45% de los encuestados cree que sí se transmite la importancia del uso de la prevención y promoción de la salud al nivel de la microgestión desde la dirección de los centros hospitalarios, si bien el 37% opina que también pero que hay mucho trabajo conjunto por realizar desde arriba hacia la microgestión en este sentido. Sin embargo, el 18% cree que esta transmisión no existe.
Ante esta situación, entre las iniciativas que los gerentes de hospital deben adoptar para la implementación de la prevención, promoción de la salud y calidad asistencial en sus centros, destacan: que esas herramientas vayan acompañadas de indicadores y que se evalúen, que propicien grupos de trabajo para crear dichas herramientas, implicando a los profesionales sanitarios y a los gestores del nivel de la macrogestión, y que establezcan programas de incentivos a los profesionales en base a la implementación y medición de resultados. “Ello, además de sumar eficiencia, ayuda a la concienciación y a la creación de cultura organizacional en torno a la prevención y la promoción de la salud, así como a la calidad asistencial”, explica el presidente de SEDISA, quien además añade que “asimismo, hay que propiciar que los profesionales sanitarios colaboren con los directivos y trabajen de forma colaborativa, aportando su conocimiento sobre este tipo de herramientas en la microgestión y su evaluación, y que integren las herramientas y su medición en su labor profesional diaria”.
En el marco del objetivo principal de SEDISA, la profesionalización de los directivos de la salud y de la gestión sanitaria, Joaquin Estévez destaca que “respecto a la prevención y promoción de la salud, contar con directivos de la salud profesionalizados significa, por supuesto, tener en cuenta y gestionar elementos fundamentales de la Prevención, Promoción y Calidad Asistencial, como algo que aporte una mejora en los resultados en salud”.